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Es responsabilidad de todos que nadie se quede atrás

La desesperación y una profunda soledad, que ya existía antes del 14 de marzo, es ahora mucho mayor y mucho más difícil de soportar para las familias vulnerables.

Esto es lo que dice Felipe Campos, quien dirige l´Associaió Educativa Itaca, sobre el impacto de la pandemia de Covid-19. 
En ciudades que se construyeron para ser consumidas y no para ser vividas, lo que más necesitan estas familias y sus hijos es información, además de ayuda para cubrir sus necesidades básicas, apoyo psicológico y educativo.

Hay mucha desinformación entre las personas a las que ayudamos. Hay gente en el barrio de Collblanc - La Torrassa, por ejemplo, que no recibe suficiente información sobre el sistema social del Estado, y esto deja a mucha gente al margen. Por eso es tan importante la colaboración de AE Itaca con Generali y The Human Safety Net. Nos permite poner a estas personas en el centro y proporcionarles no sólo esa información, sino también los recursos para que tengan la oportunidad de no quedarse atrás.

Me llamo Felipe Campos y soy el Director General de l´Associació Educativa Itaca, una organización sin ánimo de lucro que trabaja con colectivos en situación de riesgo y vulnerabilidad social, tratando de garantizar sus derechos y su dignidad. En una semana, unas 1.500 personas pasarán por nuestras instalaciones en busca de una oportunidad.