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90 %: los estudios científicos muestran que el cerebro de los niños alcanza el 90 % del tamaño de un adulto entre los 0 y los 6 años

Las investigaciones muestran que las conexiones neuronales que se forman dentro del cerebro durante este período están muy influenciadas por el entorno en el que se cría al niño

Estudios científicos en niños/as han demostrado que, entre el nacimiento y los seis años, el cerebro cuadriplica su tamaño y alcanza el 90% de su tamaño adulto.

La investigación también muestra que las conexiones neuronales que se forman dentro del cerebro durante este período están muy influenciadas por el entorno en el que se cría al niño/a, y las experiencias positivas durante la primera infancia son los cimientos más sólidos para el logro educativo y la salud física y mental de por vida.

El programa para Familias de The Human Safety Net, activo en 23 países, apoya a los padres/madres que viven en circunstancias vulnerables durante los primeros seis años de vida de sus hijos/as invirtiendo en cursos para padres y madres, centros familiares y visitas domiciliarias que se centran en construir relaciones receptivas entre padres/madres e hijos., comportamientos saludables, rutinas consistentes y experiencias ricas en lenguaje.

Los padres y madres participantes se vuelven más seguros y capaces de lidiar mejor con sus emociones y estrés. Adquieren prácticas y comportamientos sencillos que tienen un impacto comprobado en el desarrollo de sus hijos/as.

Todos los días, el cerebro se construye a través de relaciones tempranas, experiencias y oportunidades de aprendizaje. Estos tienen un impacto comprobado en la salud, la educación y las perspectivas profesionales de los niños/as para el resto de sus vidas.

Todos los sistemas biológicos del cuerpo de un niño/a responden al entorno que lo rodea. El cerebro recibe señales de cada sistema, que influyen en su funcionamiento e incluso pueden alterar su química y arquitectura. Por ejemplo, múltiples estudios han demostrado que el ejercicio físico promueve la salud cardiovascular y también estimula los procesos que conducen a nuevas conexiones neuronales y al aumento del flujo sanguíneo en el cerebro que mejoran la memoria y el estado de ánimo.

Los primeros años también son los más vulnerables: la pobreza, el estrés y el abandono pueden perjudicar las oportunidades de un niño en la vida, sobrecargando sus sistemas biológicos y teniendo consecuencias a largo plazo para su salud física y su bienestar mental.

En todo el mundo, 250 millones de niños/as menores de cinco años corren el riesgo de no alcanzar su pleno potencial y esta situación solo ha empeorado durante la pandemia mundial de Covid-19. Pero incluso cuando se enfrentan a una gran adversidad, la mejor red de seguridad para los niños/as pequeños es una relación enriquecedora con sus padres.

Aquí hay algunos recursos externos si desea profundizar en el tema: